Un país en crisis, un mundo en bancarrota, un mundial de ricos en tierra de pobres y la promesa de unas primas desorbitadas en caso de ganar
Me parece un despropósito que cada jugador de la selección española de fútbol (La roja, dicen, aunque no sé yo si este calificativo deshonra a muchos que lo recibieron en épocas dictatoriales, defendiendo las bases sociales más humildes y ssiguiendo una línea de pensamiento progresista) vaya a percibir como premio por ganar el mundial una prima de 600.000 euros (sí, cien millones de las antiguas pesetas).
Ese dato, del que tuve noticia muy tarde (hoy mismo, y ya estaba en el aire por lo menos desde hace 20 días), no me entusiasma mucho a la hora de ir a una cervecería a tomarme unas cañas viendo cómo juegan, ganan y (sobre todo) echan cuentas un hatajo de multimillonarios forrados hasta los dientes cuando el país que representan se cae a pedazos y el continente en el que juegan ya no digamos...
En fin, niños ricos corriendo tras un balón ante la mirada ilusionada de unos seguidores que olvidan sus problemas mientras pagan dos cervezas menos de las que quisieran (porque no pueden pagarlas, ya sea por ajustes del gobierno, despidos abaratados, paro indefinido...).
Es obsceno.
2 comentarios
teresa -
Lo realmente obsceno es lo que no nos cuentan. Esto no es más que una cortina de humo. Incluso creo que buscan este "escándalo": prefieren que nos escandalicemos con esto, y no pensemos que vivimos en un mundo tan terrible y absurdo como solo se atreven a ver (y ya no degamos denunciar) los que son tachados de radicales.
Y aprovecho para decir que a mí todo esto de la roja, solo me da ganas de que pierda España. Y me da rabia. Porque no quiero ni que me importe.
Fran -